sábado, 14 de junio de 2008

Después de algo más de 20 años de vida he llegado a una conclusión: no sirve de nada lamentarse.

¿Quien de aqui no la ha cagado?Que tire la primera piedra. Todos. Somos humanos. Pero y ¿qué hacemos después?Revolcarnos en nuestro propio dolor y/o equivocación, así es, dándole vueltas y vueltas al coco, sacando nuestra fase masoca al sol y maldiciendo cada paso que hemos hecho.

Ese es el primer fallo.

Después de una tarde de llorera con la amiga, de tirar todo lo que pilles por el cuarto, o de comer chocolate hasta vomitar, lo único que has conseguido es mear menos, dejar el cuarto hecho una mierda y acabar con el estómago dios sabe como. Pero bueno, uno se desahoga ¿no?Mejor sacarlo pa' fuera que tenerlo todo ahi metido dentro. Lo malo es cuando eso se convierte en algo más que un episodio pasajero. Entonces ya te replanteas hasta tu propia existencia. Bromas aparte.

Entonces entre todos esos lloriqueos llega también la fase en que no paras de echarte la culpa de todo, o echarle la culpa al vecino, o echarle la culpa al alcohol.Que más da. La cuestión es dar un paseo a la culpa y marearla un poco.

Hombre, es normal sentir dolor y frustración, sino ¿qué clase de humanoides somos? Perderíamos nuestro prestigio (ah no, el prestigio era por la inteligencia no?Creo que de eso yo no tengo.) pero eso no quiere decir que por haber pisado una mierdecilla mientras caminabas y te hayas manchado tus nuevisimas y exclusivas "converse" el mundo se vaya a acabar en ese momento. La solución es paciencia , a limpiar, y mucho estómago. Y como si no hubiese pasado nada, oye. Aún les queda mucha vida a esas zapatillas tan "fashion". Aunque a veces no es una mierdecilla precisamente, sino una mezcla entre arenas movedizas (que te meten pa' dentro y no te dejan salir) y el barro ese de las tias del barro, valga la redundancia (que debe de dejar un pringue....) Entonces eso si que es normal que te joda. Pero bueno, todo se limpia. Hay que ser positivo.

Mi padre siempre me dijo una frase muy sabia: no busques excusas, pon soluciones. Y es muy cierto. Siempre uso esa frase para todo. Y cuando menos me lo espero la vuelvo a escuchar de él...y tiene razón. Como dice esa famosa frase: " lo malo en la vida no es caerse, sino no levantarse" o como diría el gran Groucho Marx: "si los problemas tienen solución, para que te preocupas; y si no la tienen, para que te preocupas también".

Así que nada, ahora sólo falta aplicarlo.